Llueve,
Lágrimas de sangre sobre la tersa piel
del conde vampiro.
Duerme,
dormita encerrado y triste
en la soledad de su castillo.
Llueve,
Humo negro y cielo perlado,
escondite para el licántropo.
Aguarda,
ocultándose de la mirada del cielo,
vence al lobo que lleva dentro.
Llueve,
Y las gotas son diamantes
que a la bruja debilitan.
Pestañea,
Su demonio y ella no se verán como antes,
como antiguamente hacían.
Llueve,
y los cuervos de mi imaginación
vuelan libres, vuelan fieros.
Llueve,
y siento la libertad que desean todos
los demonios de mi fuero interno.
Lágrimas de sangre sobre la tersa piel
del conde vampiro.
Duerme,
dormita encerrado y triste
en la soledad de su castillo.
Llueve,
Humo negro y cielo perlado,
escondite para el licántropo.
Aguarda,
ocultándose de la mirada del cielo,
vence al lobo que lleva dentro.
Llueve,
Y las gotas son diamantes
que a la bruja debilitan.
Pestañea,
Su demonio y ella no se verán como antes,
como antiguamente hacían.
Llueve,
y los cuervos de mi imaginación
vuelan libres, vuelan fieros.
Llueve,
y siento la libertad que desean todos
los demonios de mi fuero interno.
Me encanta, y eso que la poesía, por norma general, no suele gustarme (excepto Byron y Bécquer :3). ¡Un beso! :)
ResponderEliminarMuchas gracias, tus palabras me ayudan a seguir adelante :)
EliminarQué más decir, precioso, Emily, sigues superándote.
ResponderEliminarUn beso. :3
Querida Emily, mi nombre es Maia. En primer lugar, decirte que me encanta como escribes... Que tus manos y tu mente trabajan juntas para hacer juntos tu propia obra de arte (muy buena, por cierto). En segundo lugar pedirte que te pases por mi blog y des tu opinión. Muchas gracias. http://queridoamiginvisible.blogspot.com.es/
ResponderEliminarMi querida Maia, muchas gracias por tus amables palabras. Estaré encantada de pasarme por tu blog en cuanto tenga un rato. Gracias a ti.
EliminarHermoso.
ResponderEliminar