¿Cómo estaba el cielo?
Insistes,
con la mirada clavada
en la luna y las estrellas.
¿Cómo estaba aquel día?
Preguntas de nuevo,
pero no recuerdo
ni recordaba
ni recordaré cómo eras.
Y un día te fuiste
sin decir adiós
y el cielo estaba azul,
sin nubes, yo sin voz.
Todos los días fueron
a z u l e s
en verano, sin ti
y sin tu color.
¿Cómo estaba el cielo
cuando te vi llegar?
En tus ojos,
amor, y no
sobre tu mirar.
Insistes,
con la mirada clavada
en la luna y las estrellas.
¿Cómo estaba aquel día?
Preguntas de nuevo,
pero no recuerdo
ni recordaba
ni recordaré cómo eras.
Y un día te fuiste
sin decir adiós
y el cielo estaba azul,
sin nubes, yo sin voz.
Todos los días fueron
a z u l e s
en verano, sin ti
y sin tu color.
¿Cómo estaba el cielo
cuando te vi llegar?
En tus ojos,
amor, y no
sobre tu mirar.
Me pregunto si has cogido ese clásico "¿Qué es poesía?" de Bécquer y le has dado otro aire. Estoy bastante segura de que así ha sido.
ResponderEliminarMe gusta ese verso, el de "a z u l e s" con las letras separadas. Creo que has usado la forma para expresar todos esos días de verano, espaciados entre sí, largos, únicamente azules como el cielo y a la vez, en fin, ya se sabe que en inglés se dice que uno está azul cuando está triste. Aquí parece lo mismo: el color del cielo en verano, todos los días de verano, que deberían ser alegres con ese tono vivo de azul, y sin embargo... tan tristes, tan iguales, tan lapidarios como esos ojos azules (ESA PUPILA AZUL EEEH) que tanto se echan de menos.