domingo, 15 de junio de 2014

Sueños de mar

Los ojos de Halia se perdieron
y entre las olas navegaron
como naves sin rumbo,
con el corazón embaucado.

En sus oídos resonaba el cántico
de un océano profundo,
la melodía silenciosa
que jamás había tenido el placer
de escuchar.

Olía la salitre y olía la brisa,
sentía las algas acariciando su cuerpo,
y la arena traviesa cosquilleando
bajo sus pies.

Entonces despertó,
y recordando
supo que todo había sido un sueño,
y que nunca sabría realmente
qué se siente estando junto al mar.

1 comentario:

  1. Moitas grazas! Precioso agasallo para celebrar os 20 anos. Eres a millor :D

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