Oxidación.
El chirriante sonido de no haberme amado a lo largo de estos meses.
Caducidad.
La tácita muerte de las ideas pasajeras.
Que se quede obsoleto.
Que se quede sin fuerzas.
Que lo eches de menos y no sepas por dónde empezar.
Oxidación.
O un incentivo para empezar de cero.
Caducidad.
O la falta de fuerza y valor para aferrarse a la eternidad.
Valor.
Empezar de cero,
con versos sueltos,
en un papel olvidado,
en el más absoluto silencio.
Eres maravillosa, en serio. Ojalá no dejes nunca de escribir.
ResponderEliminarMuchísimas gracias, anónimo - aunque me gustaría saber quién me considera maravillosa -. Espero no dejar de hacerlo otra vez.
EliminarUn frío beso